lunes, 26 de julio de 2010

Los Lobos a San Bartolito, Naucalpan (Julio 22 2010)






Esta rodada está dedicada a nuestro compañero Tlatilka Miguel Rivera, quien nos guió a lo largo de la misma por sus dominios (hasta su casa a eso de las 2 de la mañana) y quien fue atropellado por un auto el pasado domingo 25 de Julio 2010, en la ruta que seguían los Tlatilkas hacia la reunión de clubes en las Pirámides de Teotihuacán. De acuerdo a Ro Valderrama: Su estado es bastante delicado aún, sin embargo lo pasaron a la cama 212 del Hospital General La Villa, y hasta ayer en la noche se encontraba estable, afortunadamente el conductor está detenido y tanto él como su familia están al pendiente de todo lo que se pueda necesitar, su familia estará actualizandonos el status hoy a medio día.

Nuevamente en esta rodada nos pudieron acompañar los Tlatilkas. La lluvia que caía a la hora de la reunión logró ahuyentar a todos excepto a los mas aguerridos. Estuvieron presentes: los Tlatilkas Miguel, su hijo (Miguel también), Arturo, Popeye (Ricardo) y Esteban. Hicieron presencia además Selene, Jesús, el Doc. Manuel y un servidor.

La ruta realizada este jueves 22 de Julio 2010 cubrió cerca de 50 km (47), realizándose en 2 horas 45 minutos. Los ascensos estuvieron increíbles totalizando 700 metros de ascenso, con una altitud máxima alcanzada de 2,600 metros. Pero así de agrestes (tal como se puede apreciar en el track GPS) son los dominios de los incansables Tlatilkas.

La rodada iniciaba bajo el manto protector de la lluvia, el cual mas bien sirvió para espantar a más de uno de los aguerridos Lobos. Iniciamos la rodada por ahi de las 10 de la noche, con lluvia y con la sentida ausencia de muchos insignes Lobos. Tal debe ser el poder espantador de la lluvia :-)

Rodamos sobre Reforma hacia Periférico para después ascender por Av. del Conscripto, al final de la cual los Tlatilkas nos llevarían por ignotas rutas hacia prometidos destinos llenos de ocultas fantasías. No, ya en serio, después de Av. del Conscripto los territorios que íbamos pasando eran desconocidos para un chilango servidor. En verdad, lo que puedo decir es que la ruta era hermosa. Llegamos a un punto en donde tuvimos que saltarnos una reja (con todo y bicis) para poder continuar nuestro recorrido en lo que parecía ser una reserva natural alrededor de una cañada. Tras continuar rodando alrededor de esta cañada rodeamos y fuimos a dar a San Bartolito, pintoresco lugar en donde hasta hacía unos días había estado la feria del pueblo. Pero llegamos unos días tarde y sólo encontramos al pueblo dormido. Las fotos las tomamos frente a la iglesia del lugar. Tras de esto nuestros anfitriones nos guiaron hacia una gema escondida: un ducto de unos 30 metros de longitud por el cual por alguna razón pasa o debería pasar el agua. Imagino que sirve para desfogar el agua de las partes altas de la localidad hacia la cañada. Afortunadamente no había llovido tanto como para llenar el ducto y pudimos visitarlo por dentro :-) Las fotos no nos dejarán mentir.

Para el retorno, llegados a la localidad de El Radio (y debido a lo tarde de la hora) el grupo se dividió en dos partes: unos que llegarían al DF por la parte norte (Azcapotzalco) y otros que entraríamos por la parte centro (por Reforma). A los que nos íbamos por la parte centro nos tocaría un último ascenso de unos 150 metros para escalar el Campo Militar Num 1 y así poder arribar nuevamente a la parte superior de Av. del Conscripto, en donde se despidieron nuestros incansables últimos guías Esteban y Arturo. A Miguel y a su hijo los habíamos dejado previamente en su casa cerca de Bosque Real.

Enviamos nuestros mejores deseos a Miguel Rivera para que en su carácter de guerrero Tlatilka libre con éxito una de las batallas mas importantes de su vida. Estamos a tu lado Miguel.

Por cierto, los Lobos nos uniremos al Paseo de Todos, el cual se efectuará el próximo jueves 29 de Julio 2010, el cual saldrá del Zócalo a las 20.30 hr. Por tanto, en esta ocasión no habrá paseo independiente de los Lobos en el Ángel. Sin embargo nos vemos nuevamente el próximo Jueves 5 de Agosto 2010 a las 9 de la noche en el Ángel para continuar con nuestras nocturnas aventuras :-) Mil gracias a los que nos pudieron acompañar en esta rodada. Hasta pronto.

lunes, 19 de julio de 2010

Los Lobos a Chimilli (Julio 15, 2010)





A pesar de que la lluvia amenazaba (otra vez) con hacer de las suyas en esta ocasión, nos volvimos a reunir una cantidad impresionante de ciclistas en el Ángel (al menos para los estándares de los Lobos) pues nuevamente pudimos acudir al llamado de la naturaleza ... ! 20 ciclistas ¡.

Los nombres de los participantes: Selene, Laura con sus dos amigos, nuevamente los Tlatilkas representados por Popeye, Esteban y Rodrigo, Edgar Omar, Romy, Benjamín, Edgar, el otro Edgar, Juan, los Doctores Miguel y Gerardo, Luiyi, Miguel, dos chicos cuyo nombre se me escapa y un servidor. ¡ Felicidades y muchas gracias a todos ustedes por acompañarnos en esta ocasión ! Esperamos que no sea la última :-)

Los números: la longitud de la ruta fue de casi 50 km (47 km) saliendo y concluyendo en el Ángel de la Independencia. La altitud máxima alcanzada fue de 2,700 metros, lo cual representó prácticamente un ascenso de 500 metros sobre el nivel de la Ciudad de México. Debido a la lluvia que dominó una parte de la rodada ésta tuvo una duración cercana a las cinco horas.

Tras de decidir de democrática manera (i.e. votando) cuál de las dos rutas sugeridas (una hacia el note y la otra al sur de la ciudad) el respetable deseaba realizar, seleccionamos finalmente a Chimilli como nuestro destino para la rodada de esa noche. Chimmli es la colonia del Ajusco en donde da inicio la ciclopista rural. Esta colonia se encuentra sobre la carretera Picacho - Ajusco a 2,700 metros (sobre el nivel del mar). Rodar hacia dicha localidad implicaría realizar un ascenso de 500 metros sobre el nivel de la Ciudad de México, de noche, con la amenaza de la lluvia (la cual finalmente se materializaría) y sobre la cruel pendiente que constituye la carretera Picacho - Ajusco.

Tras realizar la sesión fotográfica de inicio de rodada, iniciamos con buenos augurios pues parecía ser que no nos llovería. En el norte acababa de llover fuertemente, asì que la ruta que el respetable escogió parecía ser la mas adecuada para evitar nuevamente la mojada. Todo iba bien hasta incorporarnos a Revolución, que fué en donde inició la fuerte lluvia, la cual nos obligó a replegarnos en una gasolinería a la altura de San Antonio en donde balanceamos nuestras opciones para evitar mojarnos como en la rodada anterior a Atizapán (en la cual parecía que rodábamos dentro de una alberca). Tras amainar un poco la lluvia, decidimos continuar con el destino seleccionado anteriormente en el Ángel: Chimilli.

Subimos compactos a través del Pedregal y justo antes del Periférico reagrupamos en el módulo de la policía. Muchos se despojaron de las chamarras, sabedores que venía el cruento ascenso por la Picacho-Ajusco. tras un breve descanso en el módulo dimos inicio al ataque del puerto ascendiendo cada quien a su ritmo. Realmente no es una ascenso muy largo, pero si que posee una muy buena pendiente (como puede observarse een el track GPS anexo a este post).

Los punteros se descolgaron desde el inicio, esto es: cruzando Periférico. Aún con la lluvia chispeando procedimos a atacar el puerto. Era en verdad algo temerario el coronar este puerto a eso de las 11 de la noche, con llovizna y en una noche que era tan oscura como la boca de un lobo. Sin embargo, como buenos intrépidos que somos, los Lobos no sabemos de peligros y rodamos sin mas cuesta arriba. En el camino hubo un reagrupamiento, pues uno de nuestros compañeros ponchó.

Una vez que arribamos a Chimilli realizamos la sesión fotográfica de rigor para a continuación emprender el descenso. Sin embargo otra ponchadura nos esperaría al incorporarnos a Av. Universidad. Tras repararla nos unimos al resto del grupo el cual ya había reagrupado en un Oxxo en donde finalmente todos pudimos reabastecernos. Tras ello nos dirigimos de regreso a la madriguera (el Ángel) a donde arribamos por ahi de las 2.30.

¡ Nos vemos el próximo jueves !

sábado, 10 de julio de 2010

Los Lobos a Atizapán (Julio 8, 2010)





En esta ocasión nos reunimos pudimos reunir lo que nunca ... ! 20 ciclistas ¡ (a tan sólo unas semanas del re-inicio de los Lobos). Los 20 integrantes fuimos: Selene, la chica de bicitekas y su novio, los Tlatilkas representados por cinco de ellos: Popeye (quien fue el guía de la rodada) , el Vikingo, Esteban, Arturo y Luis, Edgar Omar, Jesús Abel (sobrino de Matus), Romy, Juan, Benjamín, Edgar, el otro Edgar, el Doc. Gerardo, Luiyi, Miguel, Toño y un servidor.

Los datos técnicos de esta rodada, realizada bajo la inclemente lluvia de principio a fin. Distancia: 53 km, altitud máxima: 2,370 metros, tiempo de pedaleo: 3 horas, litros de agua recibidos: cientos. La velocidad media fue de ... argh, mejor ni sacarla :-) Sólo recordemos que toda la rodada fue bajo lluvia y eso explicaría muchas cosas :-)

Me gustaría mucho agradecer la presencia de los Tlatilkas que nos vinieron a guiarnos por una de sus rutas a sus dominios (o casi): a Atizapán de Zaragoza, en el Estado de México. Nos guiaron de muy buena manera por una ruta muy interesante y siempre atentos a los requerimientos del grupo. ¡ Muchas gracias ! Esperamos pronto poder volver a rodar con ellos :-)

Iniciamos la rodada justo con las primeras gotas de lluvia cayendo sobre nosotros. Ni idea teníamos del diluvio que se nos iba a venir encima. Tras salir por el Eje 3 Norte, nos desviamos a la Av. de la Naranja (en donde se regresaron - por decisión propia - la chica de Bicitekas y su novio) para de allí salir a las Armas y llegar así a la Primero de Mayo, en donde esperaríamos que se incorporaran otras personas al contingente. Fue a esa altura en donde se re-integraría con nosotros el Vikingo, otro Tlatilka que nos había alcanzado antes en el Ángel. Fué allí también en donde abandonarían la ruta (imagino debido a lo fuerte de la lluvia) tres insignes Lobos-Bike: Toño, Luiyi y Miguel. Aunque sospecho que igual se mojarían al retorno al Ángel :-) En fin ...

Desde dicha posición continuamos la aventura rodando de manera compacta hacia nuestro destino. La ruta por momentos se hacía durísima por lo oscuro de las calles, la intensidad de la lluvia, el frío y sobre todo: el cansancio producto de estar atento a cada detalle del terreno mojado. Pero no hay ruta que dure 100 años, al final logramos arribar a nuestro destino: el Mausoleo de López Mateos, en donde se encuentran enterrados los restos del ex-presidente de México y su esposa.

Tras tomarnos la fotos de rigor iniciamos el retorno a la Ciudad de México, tratando (en vano) de encontrar las míticas hamburguesas prometidas por Popeye ... Tan en vano fue la búsqueda que terminamos cenando en un Seven-Eleven. Tras de ello tomamos el Periférico con rumbo a la Ciudad de México. La lluvia seguía infame sobre Periférico (las fotos pueden dar constancia de ello). A la altura del Toreo se despidieron los Tlatilkas (Vikingo, Popeye, Esteban y Luis). También se despidió Edgar Omar pues vive por aquellos rumbos. El resto continuamos nuestro retorno primero mediante Periférico y luego por Reforma. En el Periférico de despidieron los dos Edgares, pues también son norteños. El resto Selene, Doc. Gerardo, Jesús Abel, Romy, Benjamín y un servidor continuaríamos por Reforma hasta el Ángel, en donde brevemente reagrupamos y desde donde nos dimos nuevamente a la fuga, esta vez hacia nuestras casas :-)

En retrospectiva observamos que a pesar de que la lluvia fue inclemente a lo largo de toda la expedición, la rodada se realizó con saldo blanco absoluto: no hubo un sólo caído o mucho menos accidentado. Se rompió récord de asistencia (20 ciclistas) y a ninguno de ellos perdimos. Claramente se observaron las ventajas de rodar en conjunto, agrupados, esperando a todos y a cada uno de nosotros y sobre todo: no dejando a nadie atrás a su suerte. Si alguien acaso tenía dudas acerca de la efectividad de rodar como conjunto, creo que los resultados de esta rodada le podrían indicar en que dirección debemos orientar la organización de nuestras rodadas nocturnas.

Me permito agradecer a cada una de las personas que nos acompañó en esta rodada y que junto hicieron posible el sueño de rodar a un destino ciertamente lejano, bajo la peor de las lluvias y obteniendo un saldo blanco absoluto y sin perder de vista a ninguno de nosotros. Por su ayuda al participar y rodar como conjunto ¡ Muchas gracias ! Nos vemos en el Ángel el próximo jueves 15 de julio 2010.

miércoles, 7 de julio de 2010

Los Lobos a la Caseta de Cuernavaca





En esta rodada del pasado jueves 1 de julio 2010 nos pudimos reunir 17 ciclistas quienes unidos pudimos recorrer un hermoso circuito nocturno, esta vez hacia la caseta de Cuernavaca, en la unión entre Insurgentes y Tlalpan. De ida nos fuimos por Tlalpan (por el segundo carril) y de regreso nos vinimos por Insurgentes (en el caril del metrobús). En realidad una ruta muy fluida y prácticamente sin semáforos :-)

Los ciclistas que esta ocasión nos pudieron acompañar en la nocturnal aventura fueron: Selene (Nuevamente la única chica del grupo: ! Felicidades !), Matusalén, Toño, César, Miguel Ángel, Salmerón, Romy, Arturo, Alejandro, el Dr. Manuel, Benjamín, Modesto, Luiyi, Edgar Omar, Jesús Abel, Jesús y un servidor. Les enviamos felicidades así como un profundo agradecimiento a todos y cada uno de ellos por su noble intención de acompañarnos en esta rodada.

Fue una rodada no muy larga, pues se recorrieron en total 50 km, alcanzando una altitud máxima de 2,450 m, lo cual implica un ascenso de 200 metros sobre el nivel de la Ciudad de México. El tiempo de pedaleo fue de unas dos horas, lo cual arroja una velocidad media de 25 km/hr.

Al principio de la rodada (en el Ángel) se discutieron algunos puntos relativos a la dinámica y conducción de las rodadas por venir, acordándose que se privilegiaría la seguridad del grupo por encima de todo lo demás por lo cual rodaríamos de manera compacta. De esta manera nos enfilamos sobre Tlalpan rodando compactos (por medio de la ayuda de los radios) a 30 km/hr. En cuanto arribamos al Monumento al Caminero cada quien procedió a subir a su ritmo, sin embargo la retaguardia iba bien cubierta por algunos de nosotros.

Al arribar a la caseta llevamos a cabo la sesión fotográfica de rigeour. Al finalizarla procedimos a iniciar el descenso a la Ciudad de México por la autopista re-agrupando en el primer columpio, en donde nos esperaba el mejor amigo de los ciclistas: un Oxxo. Tras reabastecernos continuamos el retorno al Ángel de la Independencia vía Insurgentes y esa hermosa ciclopista nocturna en la cual se convierte el carril del metrobús pasada la medianoche :-) Fue particularmente hermoso el ascenso a Ciudad Universitaria.

La mayoría de los ciclistas arribó al Ángel de regreso, en donde nos despedimos e hicimos votos porque este grupo pueda continuar con su (posible) crecimiento. ¡ Nos vemos el próximo jueves 8 de julio !